"Si quieres decir “sí”, solamente di “sí”, y si quieres decir “no”, solamente di “no”. Todo lo que se diga de más, viene del Maligno"
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Para no caer en tentación, tenemos que tener determinación. Cuando digamos no, es No, y cuando digamos sí, que sea porque ese Sí será beneficioso y no nos causará ningún tipo de problemas ni será de desagrado a los ojos de Dios.
Si nuestra respuesta es negativa a determinada propuesta que nos ofrezcan, lo más seguro es que la otra persona siga insistiendo.
Tengamos presente que si hay una actitud que el diablo tiene, es la perseverancia; él tratará, una y mil veces, de tentarnos para hacernos caer.
Cuando esto suceda actuemos como Daniel.
Leamos:
Daniel 1:8 "Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse"
Pero Satanás es ágil, se vale de artimañas para lograr su objetivo y que la gente caiga en la trampa.
Recordemos el caso de Sansón y Dalila.
Ella persistía para que él le dijera de donde provenía su fuerza. Valiéndose de sus encantos de mujer él un dia bajó la guardia, y le reveló el secreto que lo llevó a la perdición. Dios le había advertido que el dia que exteriorizara ese misterio, perdería la corpulencia y la robustez sobrenatural que lo caracterizaban.
La lujuria y el placer lo hicieron caer.
Jueces 16:16-17 "Y aconteció que, presionándole ella cada día con sus palabras e importunándole, su alma fue reducida a mortal angustia.▪Le descubrió, pues, todo su corazón, y le dijo: Nunca a mi cabeza llegó navaja; porque soy nazareo de Dios desde el vientre de mi madre. Si fuere rapado, mi fuerza se apartará de mí, y me debilitaré y seré como todos los hombres"
El diablo es como un hombre enamorado; no acepta un no por respuesta, él insiste.
El Señor es justo, desea que vivamos en obediencia y aún conociendo nuestra naturaleza humana, Jesús intercede por cada uno de nosotros, ¡es el único que puede hacerlo, nadie más...!
Ponte a prueba a ver que tan fuerte es tu voluntad de no caer en tentación y no fallar pero hazlo de corazón, el buen pastor te dara las fuerzas necesarias para no flaquear.
