Hay personas que escuchan la Palabra y les agrada, pero continúan actuando superficialmente, reaccionando emocionalmente, moviéndose impulsivamente y no permiten que eche raíces profundas.
Para crecer fuertes necesitamos dedicar tiempo a nuestra vida espiritual.
Lucas 8:13 "Las semillas que cayeron en las piedras son como aquellos que oyen y aceptan el mensaje con alegría, pero no tienen raíces profundas. Creen por un tiempo, pero cuando las dificultades los ponen a prueba se dan por vencidos"
Si tus raíces espirituales tienen buenos cimientos serás capaz de dar buenos frutos y estar preparado para soportar cualquier ventarrón por muy fuerte que este sea, pero si no mantienes comunión perenne con Dios Padre, a través de su Hijo vas a secarte y a derrumbarte cuando las pruebas lleguen porque te será imposible mantenerte firme.
Colosenses 2:7 "Construyan su vida sobre una base sólida, bien arraigada en Cristo; fortalezcan su fe, vivan en la verdad que se les enseñó y siempre sean agradecidos"
Más importante que la apariencia o lo que la gente pueda pensar, es quiénes somos en realidad.
¡No temas y deja que tus raíces espituales crezcan...!
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