Venerar y enaltecer el nombre del Altísimo, nos llena de gozo, así lo dice su Palabra:
Salmos 112:1 "¡Aleluya! Feliz el hombre que honra al Señor y se complace en sus mandatos"
Mostrar humildad es lo más agradable que podemos ofrecerle a quien todo lo puede, a nosotros mismos y a los demás.

No hay comentarios:
Publicar un comentario