¿Te has preguntando alguna vez si la Biblia condena la avaricia?
Pues sí, la avaricia es el deseo excesivo de tener riquezas y bienes materiales y las Sagradas Escrituras nos advierten sobre los peligros de aferrarse a la abundancia en lugar de buscar una vida centrada en Dios y en ayudar a los demás.
1 Timoteo 6:10 "Porque el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. Por codiciarlo, algunos se han desviado de la fe y se han causado muchísimos sinsabores"
Seamos precavidos porque este antivalor nos lleva a poner nuestra confianza en las posesiones terrenales en lugar de confiar en quien todo lo puede.
No te alejes de lo que él ha demostrado a través de su Palabra y recuerda lo que el apóstol Pablo le dijo a Timoteo:
1 Timoteo 6:11 "Tú, en cambio, hombre de Dios, huye de todo eso y esmérate en seguir la justicia, la devoción, la fe, el amor, la constancia y la humildad"
Ora conmigo:
Señor, solo te pido me concedas lo necesario para vivir y poder compartir con los más necesitados. En el nombre de Jesús. Amén.
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